La región de Alajuela, en Costa Rica, es una joya desconocida para los amantes del ron, ofreciendo una extraordinaria combinación de clima y saber hacer local. Situada en el noroeste del país, rodeada por montañas y paisajes exuberantes, esta región se beneficia de un clima tropical ideal para el cultivo de la caña de azúcar, el ingrediente principal del ron. Gracias a sus suelos volcánicos ricos en nutrientes, Alajuela produce una caña de azúcar de alta calidad, que da lugar a rones con sabores complejos y refinados. Las destilerías locales, impregnadas de una tradición artesanal y un compromiso con prácticas sostenibles, aprovechan los recursos naturales de la región para ofrecer rones con aromas delicados y matizados. Los rones de Alajuela atraen por su suavidad y redondez, con notas de frutas tropicales, miel y especias, ideales tanto para conocedores como para principiantes. Al explorar los rones de Alajuela, los aficionados descubren una faceta única del patrimonio costarricense, donde cada botella cuenta la historia de una tierra generosa y una pasión intemporal por el arte del ron.