El Krkošija es una variedad de uva blanca autóctona de Eslovenia, especialmente cultivada en las colinas de la región de Dolenjska, donde se beneficia de suelos minerales y un clima continental moderado. Este cépage produce vinos de perfil fresco y vibrante, con una expresión aromática dominada por notas de frutas de hueso como el melocotón y la albaricoque, acompañadas de matices florales delicados y a veces un toque cítrico.
En boca, los vinos de Krkošija suelen ser ligeros a medios, con una acidez refrescante que realza la sensación de frescura y equilibrio. Ofrecen sabores limpios y persistentes, destacando la fruta blanca y una mineralidad elegante en el final. Generalmente, se elaboran como vinos secos y tranquilos, aunque también es posible encontrar interpretaciones jóvenes destinadas a un consumo inmediato, donde predomina el carácter varietal puro y vivaz.
Por su perfil aromático y su ligereza, el Krkošija marida perfectamente con platos mediterráneos, pescados a la plancha, mariscos, ensaladas elaboradas y quesos suaves. Es una opción elegante para aperitivos y se recomienda servirlo ligeramente frío para disfrutar plenamente de su frescura característica.