El Promara es una variedad de uva blanca autóctona de Chipre, apreciada por su perfil aromático fresco y su capacidad para reflejar el terroir local. Aromáticamente, se caracteriza por notas de cítricos frescos, flores blancas, toques de pera y melón, acompañadas de matices herbáceos y minerales que recuerdan la proximidad al mar Mediterráneo. En boca, los vinos de Promara suelen ser secos, con acidez equilibrada y cuerpo medio, mostrando sabores delicados a frutas blancas y un final refrescante con sutiles recuerdos salinos.
Las principales regiones vitivinícolas donde se cultiva Promara se sitúan en las estribaciones de los montes Troodos, especialmente en zonas de altitud donde el clima fresco permite una óptima maduración de la uva, destacando municipios como Pafos y Limassol.
Este cépage se utiliza tanto para elaborar vinos varietales puros como en ensamblajes, a menudo vinificados en acero inoxidable para preservar su frescura aromática. Son vinos típicamente jóvenes, aunque algunos productores experimentan con ligeras crianzas sobre lías.
En cuanto a los maridajes, el Promara armoniza perfectamente con pescados blancos a la parrilla, mariscos, ensaladas frescas, cocina mediterránea ligera y quesos de cabra suaves. Su carácter fresco y mineral lo convierte en una excelente opción para arroces marineros y ceviches.