Crato Branco, conocido también como Síria en algunas regiones, es una variedad de uva blanca autóctona de Portugal, especialmente relevante en las regiones vitivinícolas del Alentejo y la Beira Interior. Este cépage destaca por su luminoso color amarillo pajizo y su perfil aromático delicado, dominado por notas cítricas, florales y a menudo recuerdos de fruta de hueso, como albaricoque y melocotón, acompañadas de sutiles matices minerales y herbáceos.
En boca, los vinos elaborados con Crato Branco suelen mostrar una acidez equilibrada y una textura suave, con gran frescura y persistencia. Los estilos más representativos van desde vinos jóvenes y refrescantes, pensados para el consumo inmediato, hasta versiones fermentadas o criadas en barrica, que desarrollan mayor complejidad con matices tostados y una boca más redonda.
Es un vino que acompaña a la perfección mariscos, pescados a la parrilla, arroces marineros y ensaladas mediterráneas. También armoniza bien con quesos frescos y platos de cocina asiática suave, permitiendo que sus delicados matices completen la experiencia gastronómica sin sobreponerse al plato principal.