El Incrocio Manzoni es un cépage originario de Italia, resultado del cruce entre Pinot Blanco y Riesling Renano, desarrollado por Luigi Manzoni en la región del Véneto en la primera mitad del siglo XX. Este varietal destaca por su elegancia y equilibrio, ofreciendo un perfil aromático complejo con notas de flores blancas, fruta de hueso como el albaricoque y el melocotón, ligeros matices cítricos y, en algunos casos, un delicado toque mineral y herbáceo. En boca, el Incrocio Manzoni suele ser fresco y vibrante, con buena acidez, cuerpo medio y un final persistente, donde se aprecian tanto la fruta como sutiles recuerdos a hierbas aromáticas.
Las principales regiones vitícolas donde se cultiva son el nordeste de Italia, especialmente el área de Treviso y otras zonas del Véneto, aunque su presencia se extiende a regiones vecinas. Los estilos de vino típicos incluyen blancos jóvenes y secos, tanto monovarietales como en ensamblajes, con ocasionales elaboraciones en versiones espumosas. Marida excepcionalmente bien con pescados blancos, mariscos, pastas ligeras y platos con verduras frescas. También es una excelente opción para acompañar quesos semicurados y preparaciones a base de arroz como un risotto de espárragos.