La variedad Grasevina

El Grasevina, conocido también como Welschriesling en otros países, es un varietal blanco de gran importancia en Europa Central y Oriental, especialmente en Croacia, Eslovenia y Hungría. Destaca por su perfil aromático fresco y elegante, con notas predominantes de manzana verde, pera, flor blanca y ligeros toques cítricos, que se complementan con matices herbáceos y una mineralidad sutil. En boca, suele mostrar una acidez vibrante, cuerpo medio-ligero y final limpio, a menudo con una sensación refrescante y vivaz.

Las principales regiones vitícolas donde sobresale el Grasevina son Eslavonia y la región de Podunavlje en Croacia, así como áreas seleccionadas de Eslovenia occidental y Hungría. Se elabora en una variedad de estilos, desde vinos jóvenes, secos y frescos, ideales para el consumo inmediato, hasta versiones envejecidas en madera que aportan complejidad y estructura adicional.

Es un vino versátil en la mesa, acompañando perfectamente pescados de río, mariscos, aves a la parrilla, ensaladas frescas y quesos suaves. Su acidez y pureza aromática lo hacen ideal para platos ligeros de la cocina mediterránea y centroeuropea.