El Quebranta es un cépage autóctono y emblemático de Perú, especialmente cultivado en las regiones vitivinícolas de Ica, Lima y Moquegua. Este varietal se distingue por su perfil aromático discreto, donde predominan notas sutiles de plátano maduro, manzana verde y ligeros matices herbales. En boca, el Quebranta ofrece una textura suave y redonda, con una acidez equilibrada y un final elegante levemente mineral. Es la base insustituible del famoso pisco peruano, donde revela cuerpo medio, armonía y persistentes recuerdos frutales.
Si bien el Quebranta se utiliza mayoritariamente para la elaboración de destilados, en los últimos años ha destacado en la vinificación de vinos tranquilos y frescos, caracterizados por su perfil limpio y un carácter frutal delicado. Es ideal para vinos jóvenes y afrutados, capaces de expresar el terroir costero de Valle de Ica.
En cuanto a las armonizaciones culinarias, el Quebranta resulta perfecto para acompañar ceviches, tiraditos y mariscos frescos, así como pescados a la parrilla. También marida con platos de cocina nikkei y aperitivos ligeros, potenciando sus sabores sin opacarlos.