Herzegovina, una región situada al sur de Bosnia, es un territorio vitivinícola emergente que comienza a atraer la atención de los amantes del vino en todo el mundo. Con un clima mediterráneo, veranos cálidos y secos e inviernos suaves, esta región ofrece un entorno ideal para la viticultura. Los suelos, a menudo calcáreos y pedregosos, contribuyen a la complejidad y al carácter único de los vinos aquí producidos.

Las variedades emblemáticas de Herzegovina incluyen el Blatina y el Žilavka. El Blatina, una uva tinta, da lugar a vinos tintos ricos en aromas de frutos rojos y especias, con un sutil toque de sabores minerales. Por el contrario, el Žilavka es una variedad blanca tradicional que produce vinos frescos, ligeramente florales con notas cítricas, ideales para degustaciones veraniegas.

Muchos productores en Herzegovina adoptan prácticas vitícolas sostenibles, y algunos incluso se están orientando hacia la viticultura orgánica, con el fin de preservar la riqueza natural y la biodiversidad de esta región. En resumen, Herzegovina sigue destacándose por sus vinos distintivos y el compromiso de sus viticultores con la excelencia, lo que la convierte en una región a tener en cuenta por los apasionados del vino más exigentes.