La denominación Véneto, situada en el noreste de Italia, abarca una diversidad de estilos vitivinícolas entre los más apreciados del país. Famosa por sus viñedos que se extienden desde las colinas de los Dolomitas hasta las orillas del mar Adriático, la región goza de un clima templado ideal para la viticultura. La DOCG (Denominazione di Origine Controllata e Garantita) del Véneto agrupa algunas de las denominaciones más distinguidas, símbolos de calidad superior. Entre las referencias emblemáticas, el Prosecco, apreciado por sus burbujas delicadas y su carácter fresco, y el Amarone della Valpolicella, un vino tinto rico y complejo obtenido mediante el secado de las uvas, son imprescindibles. Las variedades autóctonas como la Corvina, la Rondinella y el Glera conviven con variedades internacionales, ofreciendo una paleta aromática variada. El Véneto no se limita a vinos espumosos o potentes; también propone vinos blancos encantadores, vivaces y afrutados como el Soave. Esta región cautiva tanto por sus antiguas tradiciones vitivinícolas como por su constante innovación. Para quienes se interesan en la gestión de bodegas de vino, la inclusión de vinos de esta región asegura diversidad y refinamiento, testimonio de la riqueza y complejidad de los terruños italianos.